jueves, 20 de diciembre de 2018

Vestigios de la Guerra Civil en la provincia de Córdoba - Año 2018

Cuando escribo esto, el blog está a 200 visitas de alcanzar las 100.000. Una cifra que nos hace sentir muy orgullosos. Y esa respuesta nos anima a continuar con más ganas aún.

2018 ha sido un año muy completo. Han sido muchos kilómetros en coche. Y muchos kilómetros andando. Pisando nuestras sierras, nuestros ríos, nuestros pueblos. Y aventurándonos a salir de nuestra provincia cuando la ocasión lo ha permitido. Y muchas horas de lectura. Evidentemente, todo eso nos gusta. Y nos gusta compartirlo con vosotros.
Hemos tenido días de lluvia y días de sol. De niebla, de frío, de calor. Días tristes y días espectaculares. Días en los que no consigues nada, salvo un buen  chapetón de agua y un montón de arañazos. Y días en los que el sol reluce entre el verde y encuentras mucho más de lo que buscabas.

Muchos de esos días han sido compartidos con gente igual de interesada que nosotros en dejar constancia de estos lugares. Gente con la que hemos compartido tiempo, charlas, conocimientos, risas, comida, y algún que otro contratiempo. Gente que han acabado convirtiéndose en amigos.

De esa gente, queríamos destacar la colaboración de los que han participado de manera más activa durante este año, haciendo el blog más completo e interesante para todos.

Como siempre, desde el principio de nuestra andadura, hemos contado con la participación de Aggeo y María José para recorrer el Frente de Pozoblanco. Y ahí seguimos, junto a ellos, recorriendo trincheras olvidadas.
Luis Tejero es otro veterano en el blog. Con él hemos andado por parajes desconocidos para nosotros, y hemos descubierto posiciones perdidas en el tiempo.
Para nuestras incursiones a Jaén y en concreto a Lopera (pionera en todo este tema) hemos tenido los mejores guías posibles, José Luis Pantoja, cronista de Lopera, y Pedro Ruiz.
Con Miguel Vilches, hemos recorrido Bujalance, y hemos podido conocer de su Historia, teniendo acceso también a colecciones muy curiosas referentes a la Guerra.
Este año hemos conocido también a Bartos Rodriguez con quien ya hemos recorrido posiciones franquistas y republicanas. Y con quien esperamos continuar en 2019.
Roberto Félix, investigador toledano, nos ha proporcionado información muy interesante sobre la Guerra en nuestra provincia.
Siempre hemos contado también con la ayuda de Juan Antonio Cuestas y Rafa Ochoa en todo lo referente a armamento, munición, etc. y otras dudas que se nos han presentado. 

Ellos, junto a algunos más, han contribuido a que alcancemos las 20 entradas este año. Nuestro agradecimiento por ello. Gracias también a todos los que nos seguís, compartís nuestras publicaciones, dejáis vuestros comentarios e ideas, etc. 
Confiamos que 2019 sea un año bueno para todos, y que podamos seguir recuperando los testimonios materiales que aún quedan de la Guerra Civil en nuestra provincia. Trabajo hay de sobra. 

Por último, os dejamos un pequeño vídeo recopilatorio de lo que ha sido el blog este año, estrenando una intro creada para la ocasión y que esperamos que os guste. 

Felices Fiestas. 

jueves, 6 de diciembre de 2018

Posiciones de las cuevas del Cuzna - Villanueva del Duque

Hoy recorremos unas posiciones republicanas ubicadas en Villanueva del Duque y formadas por trincheras y un búnker bastante curioso, excavado en la roca y con dos bocas de fuego, cuyo acceso en galería está protegido por una trinchera.
En la misma línea defensiva de las >===> "Trincheras de las Morras del Cuzna" <===< que ya visitamos anteriormente, y a pocos km de ellas dirección oeste, su objetivo sería el mismo, defender para la República el paso hacia el norte cordobés de las tropas de Franco.
Vista frontal. La vegetación nos impide
la vista de una de las troneras.
El pasillo entre ambas troneras es de unos 3 m. Ambas cuentan con mesa para 
apoyo de arma automática.
Tronera oeste.
Detalle de la mesa de ametralladora.
Desde la galería de acceso, tronera oeste y
comienzo del pasillo.
Pasillo.
Nos detenemos en algunos detalles de su construcción.
Frente a la tronera este, encontramos este
 pequeño poyete.
Oquedad donde iría algún tipo de viga
 o soporte.
La tronera este se encuentra en peor estado.
Bajo la línea roja encontramos lo que nos
 pareció un desagüe.
En el exterior, entre ambas troneras,
encontramos este apoyo, calzado a conciencia,
y probablemente usado como asiento en los
ratos de asueto.
En la imagen siguiente lo vemos en el conjunto y nos hacemos una mejor idea del tamaño.
La flecha nos indica la posición
del apoyo.
Al frente, una vez cruzado el Cuzna, los cerros que divisamos estaban en poder del Ejército rebelde. En los años 30 además, no estaban los árboles que hoy pueblan la dehesa. Y si había alguno, se cortaba.
La galería de acceso a este búnker (de unos 10 m.) está protegida por una trinchera y hoy en día se encuentra prácticamente enterrada. A diferencia de la zona de tiro, no está enlucida.
El acceso desde el exterior está colmatado y la trinchera semienterrada.
Acceso a la galería. La entrada apenas se ve.
Detalle del acceso anegado.
Trinchera que da acceso a la galería.
Trinchera que da acceso a la galería.
Semienterrada.
Tronera oeste.
Tronera este.
Detalle de boca de fuego.
A pocos metros del búnker encontramos restos muy bien conservados de trincheras, también excavadas en el suelo y de gran profundidad.
Zigzagueo.
Bifurcación. Observese la profundidad.
Trinchera y nido.
Detalle construcción del nido.
Desde el nido divisamos las posiciones
franquistas, entre ellas Cerro Sordo, fácilmente
reconocible por sus antenas.
Tras un corto recorrido
 las trincheras desaparecen.
Al norte, dirección Villanueva del Duque, y protegido por esta línea defensiva se dibuja la silueta de las Minas de las Morras.
Hemos localizado más trincheras en el entorno, así que más adelante regresaremos para recorrerlas, mostrároslas y dejar testimonio de ello.