martes, 30 de agosto de 2016

Trincheras de Cerro Castillo - Pozoblanco.

Cerro Castillo se levanta sobre los 700 msnm. y se encuentra a unos 7 kms. de Pozoblanco, junto a la carretera que lo une con Villaharta. Durante la Batalla de Pozoblanco, jugó un papel muy importante en la defensa de esta localidad.

Parapeto con aspilleras de fuego.

La batalla de Pozoblanco comenzó el 6 de Marzo de 1937, con una ofensiva por parte del Ejercito franquista que partió desde Peñarroya-Pueblonuevo, Villaharta y Espiel.


Tras el éxito de la toma de Málaga y provincia, Queipo de Llano pretendía, a través del Valle de los Pedroches conquistar las minas de Almadén, y siguiendo la vía Pozoblanco - Villanueva - Cardeña, liberar el Santuario de la Virgen de la Cabeza.


La ofensiva franquista llegó hasta las mismas puertas de Pozoblanco la noche del 17 de Marzo, pero no lograron tomarlo. Ambas fuerzas estaban exhaustas. El último intento nacionalista de capturar Pozoblanco fue el día 20 de Marzo. Pronto comenzaría la contraofensiva Republicana. Pero eso lo veremos más adelante.
Hay testimonios que indican que la lucha en Cerro Castillo fue muy violenta con gran número de bajas por ambos bandos, especialmente de moros por el bando franquista.

Desde el Cerro, tenemos una amplia panorámica, en la que
 divisamos La Chimorra, punto más alto de la mitad
norte de la provincia de Córdoba con sus 959 msnm.
y que también fue escenario de cruentos enfrentamientos
durante esta campaña.


En nuestra subida al cerro, primero encontramos una linea de trincheras situada algo más abajo, con su característico zigzagueo y más básica que las que se encuentran en la cima.



Las trincheras están construidas con pizarra del lugar, aún sorprende que con 80 años ya, conserven su estructura.

En esta imagen podemos observar el angulo que hacen
para facilitar la posición de disparo.

Las trincheras cubren el cerro.

Detalle de recodo en la trinchera.



Posible emplazamiento de Ametralladora.

Detrás de las trincheras, y a escasa distancia, encontramos varias construcciones de distinto tamaño y forma.

Posible abrigo de tropa o puesto de mando.
Recubierto con sacos terreros y lona a modo de tienda de
campaña.

Circular.


Este tipo de tiendas, se venían usando
desde las campañas de Marruecos.


Encontramos varios con esta forma, quizás emplaza-
mientos de mortero.


Detalle de la construcción de la aspillera de fuego.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Bunker del Cachiporro - Belalcázar

Ya hemos recorrido varios búnkeres de la linea defensiva del ejército franquista en el Zújar >====> Linea defensiva del Zujar <====< . Hoy nos detendremos en el nido de ametralladora que se sitúa en el paraje del Cachiporro, próximo, como la mayoría de los que ocupan esta linea, al río Zújar, frontera natural entre Andalucía y Extremadura, y entre combatientes durante gran parte de la guerra.
Prácticamente enterrado, solo sobresale la tronera, a ras de suelo, y el techo. Apenas es visible entre el campo de espigas que hoy cubre su emplazamiento. Está construido en hormigón armado, pero la parte visible simula los millares que por allí abundan.
En la siguiente imagen de perfil, podemos observar como parece un accidente geográfico propio del lugar, y no un bunker.
Solo cuenta con una tronera orientada al sur republicano, y la puerta de acceso (en la imagen de abajo).
El interior, por su  construcción, se encuentra en muy buen estado.
Desde esta perspectiva podemos observar las armaduras que contribuyen a formar el hormigón armado.

domingo, 21 de agosto de 2016

Cerro de las Cabezas (Nido I) - Fuente Tójar.

Tras el 18 de julio, el Cerro de las Cabezas fue tomado por las fuerzas de Priego. Estableciéndose allí un puesto de vigilancia, y sufriendo el primer ataque de las fuerzas republicanas el  23 de Octubre, que hizo huir a los falangistas de Fuente Tójar, dejando un herido en el camino. 
Desde esta toma, además del gran campo de visión,
podemos observar a la izquierda el 2º nido
Esta ocupación duró poco, las fuerzas franquistas contraatacaron por sorpresa, e hicieron huir a los republicanos, dejando atrás tres muertos, material de guerra y un prisionero.
Acercándonos al nido
Más cerca. Podemos ver una de las aspilleras
que aún se conservan
Debido a su importancia estratégica (desde la meseta que domina el cerro se controlaba Fuente Tójar y las vías de acceso a Priego) y unido a su condición de  defensa avanzada de la orilla occidental del Río Caicena frente a las líneas republicanas, el Cerro de las Cabezas cambió varias veces de dueño durante la guerra.
En 1937, dentro de la maniobra de distracción por parte del Ejercito Republicano, frente a la toma de Málaga, el Comandante Pérez Salas ordena un ataque sobre la linea Villafranca - Montoro - Villa del Río - Lopera y Porcuna. También atacan por la aldea de Zamoranos y Fuente Tójar, por lo que el Cerro de las Cabezas vuelve a manos republicanas, pero por poco tiempo, ya que es recuperado por un fuerte contraataque enemigo.
Posee tres aspilleras, que por su tamaño y angulo, indican que son de fusileros.

El interior, de un metro de ancho por tres de largo no lo hace apto para instalar armas automáticas.

viernes, 19 de agosto de 2016

Cerro de las Cabezas (Fortificaciones) - Fuente Tójar.

El Cerro de las Cabezas, además de ser un importante yacimiento arqueológico del asentamiento íbero-romano Iliturgícola, fue también escenario de la guerra civil en el Frente Oriental Andaluz, que se situaba entre Priego y Alcalá la Real, y en donde encontramos Fuente Tójar.
Aún podemos distinguir dos líneas claras, una arriba del Cerro, formada por 3 fortificaciones (en peor estado) y de la que nos ocuparemos en esta entrada, y otra, algo más abajo, que consta de tres emplazamientos para nidos de ametralladoras y fusilería, que se encuentran mejor conservados y que veremos más adelante.
El fortín que aún se conserva, es un puesto de tiradores situado en el centro. Tiene forma rectangular, con un acceso en recodo con doble muro, y cuatro aspilleras de fuego. 
Detalle del recodo en la entrada
En él, aún se pueden apreciar las aspilleras y un apoyo de tirador.
Apoyo de tirador
Detalle de aspillera
A pocos metros de él, encontramos un aljibe íbero-romano, probablemente reutilizado durante la guerra.
Del fortín situado más al oeste, apenas se conservan restos del muro. Podría tener entre unos 4 o 5 mts. de forma cuadrada, y sería refugio de tropa o munición.
Lamentablemente, del último de los fortines, solo quedan escombros, así que es difícil imaginar su función...
En las siguientes entradas, veremos la linea defensiva inferior, formada por tres nidos en mejores condiciones, y continuaremos con Fuente Tójar.

viernes, 12 de agosto de 2016

Cuartel General de la Morra - Pozoblanco

Pozoblanco, y todo lo que significó la "Batalla de Pozoblanco", han dejado muchas huellas que aún perduran sobre el terreno.
Hoy nos detendremos en los primeros días de la guerra en Pozoblanco. El día 19 de Julio, estando reunido el Pleno del Ayuntamiento en espera de novedades, el Capitán de la Guardia Civil procedió a incautarse del mismo, exhibiendo el telegrama recibido de la Comandancia de Córdoba que decía:
INCAUTESE TODA URGENCIA AYUNTAMIENTO Y DEME CUENTA DECLARACIÓN ESTADO DE GUERRA.

Ruinas del caserón de La Morra, que  ejerció de improvisado
Cuartel General Republicano.

Como ocurrió en otros lugares, el personal de izquierdas salió del pueblo, y estableció su Cuartel General en el antiguo caserón de La Morra, situado en un altozano desde el que se domina el pueblo.



La Guardia Civil de los pueblos de alrededor pasó a concentrarse en Pozoblanco, por lo que estos pueblos, pasaban de nuevo a manos de la República, enviándose desde Pozoblanco expediciones de castigo que volvían a tomarlos, pero el mismo día los abandonaban.



En Agosto, recibida la ayuda de los mineros de Peñarroya, Almadén y Jaen, junto al Ejercito Leal, la resistencia (que no recibió ayuda del exterior) fue decayendo. Pozoblanco se rindió el 15 de Agosto, junto a la mayoría de los pueblos de la comarca.



Aunque ahora la arboleda nos impide ver Pozoblanco, el edificio de COVAP nos muestra por donde anda.



Hasta 1855, el caserón había sido un convento, que con la Desamortización llevada a cabo ese año, pasó a manos privadas.



A lo largo de la guerra, las parideras, corrales, zahurdas, cuadras, etc. se convirtieron en puntos claves de logística bélica, pasando de guardar animales a acoger tropas, suministros, morteros, y hasta hospitales de campaña... 



Desconozco si las construcciones que encontramos junto al caserón, pertenecen a él,  y si son del mismo periodo, pero valgan como ejemplo.









En este mismo paraje, más adelante veremos las trincheras de La Morra, que se construyeron durante la Batalla de Pozoblanco, como segunda linea defensiva, para que en caso que los Nacionales tomasen el pueblo, poder establecer la línea de frente en Villanueva.